Le gritó "negro de mierda": qué contó un testigo clave del crimen de Fernando Báez Sosa

Un testigo de 20 años de edad que estuvo en el boliche Le Brique de Villa Gesell la noche que mataron a Fernando Báez Sosa. En declaraciones a la justicia de la localidad, aseguró que los rugbiers atacaron a la víctima sin razón aparente. Además, dijo que golpearon a Fernando y que cuando ya estaba en el piso, uno le gritó “negro de mierda”.

Según relató Infobae, el joven relató que el sábado 18 de enero fue a bailar a Le Brique con un amigo. Mientras estaba viendo al trapero Neo Pistea, vio una pelea entre un grupo de chicos que fueron sacados del boliche, cuando decidió salir él también porque hacía mucho calor y había mucha gente (declaración que hizo ante el juez de Garantías de Villa Gesell, David Mancinelli, y Fernando Burlando, abogado de la familia de Fernando Báez Sosa).

Al salir, el joven dijo que vio a unos chicos hablando cuando otro grupo los empezó a golpear. “Fue un ataque en patota”, relató, y aclaró que Fernando nunca los arengó ni incitó a iniciar ni seguir con la pelea.

Cuando Fernando y su amigo ya estaba en el piso tras los golpes, el testigo relató que uno de los agresores le pegó a Fernando (ya tirado) y le gritó “negro de mierda”.

Para la justicia, este nuevo testigo resulta clave porque, si bien los amigos de Fernando declararon bajo juramento, el vínculo juega un papel importante en sus relatos. El joven de 20 años aseguró que no tiene ningún vínculo ni conoció a Fernando ni a los rugbiers implicados en el crimen.

Además, su relato se suma al del amigo de Fernando que fue golpeado junto con él: “Estábamos hablando cuando aparecen por detrás un grupo de sujetos, le pegaron golpes de puño a Fernando, lo empujaron y lo tiraron al piso, yo traté de defenderlo, me empujaron al piso, me caigo, me pegan patadas por todo el cuerpo, principalmente en la cabeza, creo que al menos eran tres personas los que me pegaron a mí. Cuando logro levantarme veo a algunos amigos golpeados, a Fernando ensangrentado, con la cara golpeada e inconsciente. Uno de los flacos dice ‘A ver si volvés a pegar, negro de mierda´”, relató este amigo de Báez Sosa.

A su vez, una fuente judicial le aseguró a Infobae que el joven testigo hizo una descripción física de quienes le pegaron a Fernando y su amigo: “Sí, coincide con la de los rugbiers", dijeron las fuentes judiciales.

Si la declaración de esta persona puede ser probada por la justicia, se podrían agravar las condiciones para los rugbiers detenidos, condicionados por los dichos discriminatorios referidos a Fernando.

En declaraciones en el canal de noticias A24, Fernando Burlando dijo: “Es importante la contundencia y la prolijidad del testigo (en referencia al nuevo testigo, que llaman “Testigo T”)”

"Es un testigo que se angustió, se quebró varias veces y se sintió mal por no haber podido actuar ante semejante hecho”, sostuvo.

“Para nosotros está terminado (la resolución del caso), la investigación fue contundente, sí son diligencias que deben realizarse (…) Frente a la gran cantidad de participantes en el hecho, es difícil memorizar cada protagonista”.

“Sólo queremos que los que participaron en el hecho tengan una condena. A la familia (de Fernando) no le interesa tener rehenes”, agregó.

Y por último: “Los términos racistas no es algo menor, es algo que prevee la ley como posibilidad de sanción”.

Los 10 rugbiers acusados por el crimen son Lucas Pertossi (20 años) Matías Franco Benicelli (20), Ayrton Michael Viollaz (20), Máximo Pablo Thomsen (20), Luciano Pertossi (18), Alejo Milanesi (20), Tomás Enzo Comelli (19), Juan Pedro Guarino (19), Ciro Pertossi (19) y Blas Sinalli (18).