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La “renovación” del peronismo pos derrota del 2015 no sólo viene de la mano del Grupo Esmeralda que comanda el lomense Martín Insaurralde. El otro espacio que aglutina alcaldes, el Grupo Fenix, también apunta a un mismo objetivo, pero con distintos métodos. Se sabe que este espacio, con perfil más kirchnerista y menos dialoguista que El Esmeralda, lo componen los alcaldes Verónica Magario (La Matanza), Gustavo Menéndez (Merlo), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Ariel Sujarchuk (Escobar), Santiago Maggiotti (Navarro), Walter Festa (Moreno), Francisco Echarren (Castelli) y Ricardo Curutchet (Marcos Paz).
En las distintas tertulias y cónclaves que se vienen realizando en este acalorado diciembre, muchos alcaldes y legisladores alertan (con buenos y malos ojos), sobre el desembarco del joven alcalde Echarren en el equipo de María Eugenia Vidal, al frente de una nueva Subsecretaria de Tierras, Urbanismo y Vivienda. La foto del intendente de Castelli con Vidal generó diversas reacciones y enojos en la diversa tropa peronista bonaerense. “Traidor”, fue la palabra que muchos legisladores -ligados al Grupo Esmeralda- lanzaron ante el hecho. Sin embargo, en vario despachos municipales de la Primera Sección, afirman que el arribo de Echarren “no fue una traición”.
Según pudo saber CRONOS, el Grupo Fénix, consiente de no tener los legisladores que el Grupo Esmeralda y con la bronca de haber quedado “afuera del reparto” en la discusión del Presupuesto el año pasado, este año decidió sentarse a negociar y tender puentes subterráneos con Gobernación. El enlace para estas conversaciones lo tiene el ex massista Joaquín De la Torre, flamante Ministro de Gobierno bonaerense.
Entre sus variantes, según relatan las fuentes consultadas, el Grupo Fenix avaló el desembarco de Echarren en el equipo de Vidal, como un “globo de ensayo” para ver futuros arribos. En ese objetivo, el que apuesta por esa vía es “El Tano” Menéndez, intendente de Merlo y quien lleva en su currículum el haber destronado el año pasado a Raúl “Vasco” Othacehé, uno de los barones del Conurbano más temido y que más enquistado en el poder estaba. Las “ambiciones” de Menéndez son variadas. En la actualidad posee uno de los más altos porcentajes de aprobación en cuanto a su gestión municipal en relación con otros intendentes. Es más, semanas atrás, según pudo saber CRONOS, en la necesidad de contar con un intendente fuerte en el Conurbano, “Mariu” le ofreció al “Tano” integrarse a su equipo, oferta que fue rechazada por el alcalde. Con los días, se produjo el desembarco de Echarren. Muchos recuerdan que en principio, Menéndez y Echarren se acercaron al Grupo Esmeralda, pero al tiempo se mostraron sonrientes con Magario y el resto de los intendentes en el Grupo Fenix.
En varios cafés y cenas nocturnas en el Conurbano, son muchos los que agregan más trama al asunto. De a poco se va escuchando que Menéndez sueña con el sillón del PJ bonaerense, que actualmente ocupa el matancero Fernando Espinoza. En ese plan, que despierta recelos en varios integrantes de Los Fenix -en especial en Magario- las opciones, aún en borrador, del alcalde Merlo es tantear si lo hace “con o sin ayuda de la Gobernación”.
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