En la noche del miércoles un efectivo de la Policía de la Ciudad recibió un disparo en una pierna cuando se enfrentó a tres delincuentes que le pretendieron robar el vehículo: en los asientos traseros del Peugeot 208 estaba el pequeño hijo del oficial.
Alrededor de las 20:45 la víctima salió de la casa de un amigo a donde llegó para buscar al nene. Cuando iba a subir al automóvil que estacionó sobre la calle Misiones, en Bernal oeste, un Toyota Etios con cuatro ocupantes se detuvo a pocos metros.
Del rodado descendieron tres sujetos que lo abordaron a punta de pistola y le pretendieron sustraer el automóvil. El hombre, temeroso de que también se lleven al niño, se resistió a entregar las llaves y forcejeó con los violentos que le dieron un culatazo y algunas trompadas.
La víctima se los sacó de encima, retrocedió y sacó el arma reglamentaria para repeler el ataque. Durante el intercambio de balas el personal policial recibió un disparo en el pie derecho y puso en fuga a los malvivientes: dos escaparon en el Etios y los otros lo hicieron a la carrera por donde llegaron.
El efectivo fue trasladado al Hospital Eduardo Wilde donde le realizaron las primeras curaciones antes de ser derivado al Hospital Italiano de la Ciudad de Buenos Aires.
La UFI de turno del Departamento Judicial Quilmes quedó a cargo de la investigación y ordenó las primeras medidas para identificar a los delincuentes. Hasta el momento se desconoce si alguno resultó herido.